No compres huevos de gallinas infelices
Cuando comes un huevo, estás asimilando algo que un ser vivo creó, ¿y cómo lo creó? bajo sufrimiento, o era feliz cuando lo hizo. Su infelicidad o felicidad también la estás asimilando hacia ti.
Es importante saber pues, ser conscientes de lo que nos comemos.

¿Sabes que el 95% de los huevos que se consumen en España proviene de gallinas que viven encerradas en jaulas? Los datos fueron publicados por la Organización Interprofesional del Huevo y sus Productos en colaboración con el Ministerio de Medio Ambiente. Resulta sorprendente que en ese informe se defiende que “todos los sistemas de alojamiento de gallinas, adecuadamente manejados, garantizan el bienestar animal”.

Pero…¿cómo se garantiza el bienestar de un animal que pasa toda su vida dentro de una pequeña jaula sin acceso al exterior? ¿Cómo se produce éticamente cuando son aplicadas técnicas de iluminación artificial que obliga a las gallinas a producir huevos incesamente?

Mi nombre es Irene Ramos y a mis 21 años he decidido intentar poner de mi parte para cambiar esto. Como consumidores, debemos recordar que hablamos de animales sociables que sienten, y no de maquinaria de producción. Por eso necesitamos el apoyo de las grandes cadenas de alimentación para cambiar esta situación. Si en otros países está pasando, ¿por qué en España no?
La UE en 2012, prohibió la cría de gallinas en jaulas en batería (los llamado tipo 3) y países como Bélgica, Holanda y Francia han aceptado estas medidas y comenzado la retirada del mercado de este tipo de huevos. Entre otros, supermercados como Carrefour, Lidl y Aldi se han comprometido en diciembre de 2016 a que para 2020 habrán eliminado en Francia la venta de un producto que fomenta una industria basada únicamente en la explotación animal ignorando el aspecto ético.
España no se ha unido aún a esta iniciativa, y dado que constituimos el segundo productor de huevos en Europa,nuestra ayuda supondría un gran cambio respecto a las condiciones a las que se ven sometidas millones de gallinas cada día.
Cada vez son más los productos aptos para vegetarianos o veganos que estamos viendo en Mercadona, por eso no creo que sea muy difícil adquirir ese compromiso.
Si conseguimos que el mayor de los supermercados de España se comprometa, así podremos forzar al resto a seguir su ejemplo.
Otra razón para sumarnos al cambio además de la ética, es el aspecto sanitario. La Normativa Europea de Agricultura y Ganadería Ecológica establece que los animales criados en granjas ecológicas no pueden tratados o inyectados con hormonas de crecimiento, antibióticos u otros medicamentos que camuflen la alimentación deficiente o la insalubridad a diferencia de las granjas intensivas.
Un estudio por higienistas de la Universidad Técnica de Munich (TUM) demostró que las bacterias detectadas en la cría ecológica de gallinas muestran mucha menor resistencia a los antibióticos que las gallinas enjauladas. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/18667026 Paralelamente, cada día observamos el auge de las infecciones por bacterias superresistentes en nuestra especie.
Tal vez hemos olvidado que somos lo que comemos y que primar tan sólo la eficiencia económica tiene consecuencias en nuestra salud y calidad de vida.
Como consumidores, seamos dueños de nuestra alimentación y conscientes de las consecuencias que provocamos con nuestra compra.
Como productores, seamos promotores del cambio a una sociedad más humana e implicada con el medio ambiente.